Mis Apuntes Musicales

Se cumplen hoy 200 años de la muerte de uno de los músicos más importantes de todos los tiempos: F.J. Haydn. Nacido en una pequeña localidad de Austria, desarrolló la mayor parte de su carrera musical al servicio de la familia Esterházy, una de las más ricas e influyentes del Imperio Austríaco. Bajo su protección Haydn tuvo una gran responsabilidad, consistente en componer música para cada ocasión, dirigir la orquesta, interpretar música de cámara con miembros de la orquesta y también de la familia, así como organizar el montaje de óperas (presentaba todas las semanas dos óperas y dos conciertos, además de las obras especiales para los visitantes destacados, y conciertos de música de cámara diarios en los que el propio príncipe tocaba la viola de bordón). Dotado de un carácter afable y bondadoso, mantuvo una estrecha amistad con W.A. Mozart, profesándose desde el primer momento una admiración mutua. Es considerado el padre la sinfonía y del cuarteto de cuerda, ya existentes con anterioridad pero a los que otorga su forma definitiva, componiendo nada menos que 104 sinfonías y un gran número de cuartetos. Luego de abandonar el mecenazgo de la familia Esterházy viaja a Londres, ciudad en la que reside varios años antes de regresar definitivamente a Viena, lugar en el que fallece en el año en que Viena era atacada por las tropas de Napoleón.

Afortunadamente, y a diferencia de otros grandes músicos, el genio musical de Haydn fue reconocido en vida, incluso por el mismo Napoleón.

El carácter jovial de Haydn se refleja en la sinfonía Los Adioses: en ella los músicos van dejando de tocar paulatinamente y abandonando el escenario, uno tras otro, hasta que éste se queda vacío. Fue compuesta para hacerle ver al príncipe Nicolás Esterházy el descontento de los músicos de la orquesta por prolongar demasiado su estancia en palacio sin ver a sus familias. Era la forma de darle a entender que tenían ganas ya de regresar a sus casas...